Este verano nos lanzamos a participar en una nueva iniciativa, para abrir el abanico de actividades de verano a los txikis de la parroquia: el campamento de Infancia Misionera (organizado por OMP), que tuvo lugar en Javier (Navarra) a finales de junio y principios de julio, para txikis de 3º a 6º de primaria (8-9 años a 12 años). Fran participó como monitor en el campamento con 50 txikis y más de 12 monitores venidos de muchas diócesis para pasárselo bien juntos este verano, y compartir la fe como «pequeños misioneros».
Os comparto la noticia que salió en TRECE haciéndose eco del campamento, el video-resumen realizado por los monitores, y el artículo que OMP hizo recogiendo las impresiones justo al terminar.
Gran éxito del campamento de Infancia Misionera
Tras una semana, ayer, domingo 3 de julio, concluía el primer campamento de Infancia Misionera que ha organizado Obras Misionales Pontificias en España. El marco en el que se celebraba era inmejorable: Javier (Navarra), la casa del Patrón de las misiones.
Y la experiencia ha sido inolvidable. 50 niños llegados de distintas diócesis compartieron actividades y conocieron las vidas de grandes misioneros de la historia como Santa Teresa de Calcuta, San Francisco de Asís o el anfitrión, San Francisco Javier. Durante la semana, hubo momentos de oración, de piscina, juegos y rastreos. Momentos de catequesis, de adoración y Eucaristías.
Además, el grupo fue acogido en el monasterio de Leyre y tuvo una visita guiada por el castillo de San Francisco Javier. Uno de los momentos más emotivos, fue la Eucaristía que celebraron en la capilla en la que fue bautizado San Francisco de Javier y que fue presidida por el Arzobispo de Pamplona, D. Francisco Pérez.
“Los niños también son misioneros, esto es la Obra de la Santa Infancia”, comentó la hermana Roberta Tremarelli, la secretaria internacional de la Infancia Misionera, que quiso viajar hasta Javier para conocer esta iniciativa de primera mano. “Cuento con vuestras oraciones por todos los niños del mundo”, fueron sus palabras de despedida y ánimo a los participantes.
Los monitores del campamento estaban muy satisfechos con el trabajo realizado y con la “semilla que se ha plantado”. “Estamos muy cansados pero muy contentos, los niños nos han enseñado muchas cosas, nos ha sorprendido positivamente la naturalidad con la que son capaces de hablar de Dios a los demás, algo que a los jóvenes nos cuesta un poco en ocasiones”, declaraba Fernando González, responsable del campamento.
La semana terminó con la Eucaristía, en la que participaron los padres de los niños, en la Basílica de Javier y una comida fraterna en el campamento.
Fuente: Obras Misionales Pontificias – OMP (Pincha aquí).
Galería de fotos del Campamento: