Comayagua, 7 de abril del 2020
Queridos amigos:
Reciban un saludo muy cordial y agradecido; y más sentido que nunca….en estas circunstancias tan duras y difíciles y trágicas….Pero sin perder la esperanza y la confianza.
Y perdón por la falta de comunicación a través del correo. Lo hago casi a diario por whastapp.
Espero que vosotros y vuestras familias estéis bien física y psíquicamente. Aunque nos duele y preocupa y lamentamos tanto dolor, sufrimiento y muerte. Y en nuestra pequeñez e impotencia y además de cumplir con lo que se nos pide, sí podemos insistentemente orar y suplicar al Señor…
Naturalmente sigo por las noticias mundiales y nacionales y por mi familia la situación. Aunque no me obsesiono ni le dedico demasiado tiempo; hago lo que debo; ayudo lo que puedo (siempre con el infinito agradecimiento a vosotras-os, a Balmaseda, a otras personas…) y presentarle al Señor y a la Madre toda esta triste y dificilísima realidad.
He visto lo de la Residencia; al padre Francisco bendiciendo al pueblo y diciendo la misa; a los comerciantes con su RESISTIRÉ…Resistiremos, con Dios y los cuidados médicos y la solidaridad y responsabilidad de todos, y la suerte…Y a levantarse de las cenizas.
En estos momentos me encuentro en la comunidad marista. Somos 5; cuatro de más de 70 años. Y desde horizontes y, más desde la comunidad, me aconsejaron de no estar entrando y saliendo…Estoy siempre en contacto con los educadores y con los muchachos…todos los días les mando un saludo, un mensaje en un pequeño video. Y hablamos por video llamada…Reduje al máximo el número de personas en Horizontes. Sólo el subdirector llega de fuera cada día en su carro. La cocinera ahora vive en horizontes. Y, gracias a Dios, están muy bien y no les falta nada.
A las dos de la tarde me mandaron unas fotos en el laboratorio de informática. Y le he llamado al educador y me dice que lo hicieron muy bien. Ahora una pequeña merienda y a las 4 el tan esperado campeonato de fútbol. No cabe duda de que son unos privilegiados; y más en estas circunstancias.
El señor alcalde decía en un mensaje, hace una semana, que somos unas 165 000 personas en el municipio. Y que más de la mitad viven al día: no tienen cuenta en el banco, ni despensa, ni congelador, ni sueldo…Algunos con unos 2 euros o tres al día. Que estaban preparando unas bolsas de comida, unas 18 000 bolsas para entregarlas casa por casa con el ejército. Y la gente esperando como el maná. Llevamos ya más de 15 días encerrados….Y los qué no tenían nada guardado…Son muchísimas mamás las que me han llamado y siguen llamando. Ahora mismo, mientras escribo me han llamado 4…Como yo no puedo salir, ni pueden venir ellos aquí a los Maristas, he hablado con una tienda-pulpería y ellos van allí, y yo le digo al señor la cantidad de dinero que les puede dar en comida. Y, cada tres días pasa a que le pague. Algunos necesitan también medicinas…no sólo existe el coronavirus. No tienen medicamentos para la diabetes, para la tensión, para una infección…habré podido ayudar un poco a unas 100 familias. Que ven los cielos abiertos…
Sigo; había atendido una llamada de doña Betis, la señora a la que le falta el brazo, que mataron a su hermana y cuñado, sobrinos….incendio…y que se ha quedado responsable de 6 sobrinos entre 4 y 14 años. Vive muy lejos de aquí, a unas 10 horas de bus, de carro, de caminar. Le había mandado un poco de dinero hace unos días; lo sacó del banco y compró alimentos y guardó un poco. Regresaba con otras personas en un carro de paila. Las asaltaron y les robaron TODO. Yo le dije que fuera con los niños a solicitar ayuda, que no les podía dejar morir….Me dice que los militares la golpearon…le duele mucho la espalda y una pierna…y le obligaron a regresar a casa. Hay muchos asaltos y robos…Dice que una dueña de una tienda que venía con mercadería, con alimentos…. para vender y ayudar a la gente…le robaron TODO, por valor de unos 62 000 lempiras.
No os canso más…Les esperan a estas pobres gentes días, meses, años? Muy duros.
Y aquí dicen mucho SOLO DIOS; pero Dios sólo no lo puede hacer. Ya nos demostró todo su infinito y compasivo AMOR hasta dar la vida…para que siguiéramos su ejemplo. Esto es lo que nos falta, ser auténticos cristianos…HUMANOS, JUSTOS, SOLIDARIOS…
Seguimos muy unidos en el recuerdo, la amistad, la gratitud y la oración.
Saludos a todos.
Un fuerte y cariñoso abrazo{ Goyo